Varias son las medidas políticas y económicas que se han dado a conocer en las últimas jornadas, junto a estas están también sanciones particulares que buscan acorralar a la potencia.
Vodka, relojes, ballet… ¿relegados?
La exclusión de los bancos rusos del Swift, la suspensión del gasoducto Nord Stream, el congelamiento de los activos de los oligarcas rusos y la confiscación de sus yates, y la salida de numerosas empresas de territorio ruso, son algunas de las duras represalias que ha emprendido Occidente contra ese país luego de que concretara la invasión a Ucrania.
Pero las sanciones no se han quedado solo en el plano económico. En lo deportivo, Rusia también fue excluida del próximo Mundial de Fútbol, de los Juegos Paralímpicos, se le quitó la final de la Champions League –que se disputaría en San Petersburgo– y numerosos clubes europeos han roto sus contratos con auspiciadores de ese país.
Mientras que en el ámbito del entretenimiento, Disney, Sony Pictures, WarnerMedia y Paramount suspendieron el estreno de sus nuevas películas en los cines rusos. Además, el país quedó fuera del popular Festival de Eurovisión; y el Festival de Cannes dijo que los representantes de Rusia “no serán bienvenidos”, entre un sinfín de medidas.
Veto a los gatos criados en Rusia: “Esto es una tontería total”
Al margen de estas sanciones, que no están pasando inadvertidas en ese país, han surgido otras iniciativas más aisladas y menos convencionales para intentar castigar a Rusia por la agresión que está llevando a cabo contra Ucrania.
Una de éstas fue anunciada por la Federación Internacional de Felinos (FIFe), que prohibió la importación y el registro de pedigrí de los gatos criados en Rusia, junto con vetar la participación de expositores rusos en las distintas ferias y exposiciones internacionales que realiza la organización. Estas restricciones comenzaron a regir el 1 de marzo y se extenderán al menos hasta el 31 de mayo, con la posibilidad de ser revisadas.
“La junta ejecutiva de la FIFe está conmocionada y horrorizada con la invasión de Rusia a Ucrania”, señala la organización en su página web, explicando que la entidad “no puede simplemente presenciar estas atrocidades” sin implementar acciones.
También destaca que “miembros de los clubes FIFe fronterizos con Ucrania, como Polonia, Rumanía, Hungría, Eslovaquia y Moldavia, están ayudando a sus amigos cuidadores ucranianos”, muchos de los cuales “están tratando desesperadamente de cuidar a sus gatos y otros animales en estas difíciles circunstancias”.
La noticia fue comentada ampliamente en Rusia, donde varios criadores de gatos recibieron la noticia con una mezcla de incredulidad y sorpresa. “Esto es una tontería total. Se están castigando a sí mismos. Si los clubes rusos que pagan por participar en las exposiciones internacionales dejan de asistir y crean su propia comunidad, será la FIFe la más afectada”, declaró Liudmina Makárova, presidente del Club de Aficionados de Gatos de Moscú.
“Estas medidas no van a provocar nada más allá de una sonrisa”, comentó, por su parte, el director general del Gran Circo Estatal de Moscú, Edgar Zapazhni.
No más vodka… en supermercados estadounidenses
Otra iniciativa propia en contra de Rusia es la que implementó la cadena de supermercados Publix, con sede en Florida, Estados Unidos, que decidió “eliminar” de sus estantes las marcas de vodka de fabricación rusa, en señal de solidaridad con Ucrania.
“Publix apoya al pueblo de Ucrania. Para mostrar nuestro respaldo, hemos decidido eliminar las marcas de vodka de fabricación rusa de nuestros estantes. Esto incluye todas nuestras licorerías“, señaló la cadena, en un comunicado.
El supermercado cuenta con unas 1.280 tiendas minoristas en siete estados –Florida, Georgia, Alabama, Carolina del Sur, Tennessee, Carolina del Norte y Virginia–, donde no estará a la venta ningún vodka de procedencia rusa.
La medida se produce en medio de una creciente presión sobre las empresas estadounidenses para que prohíban o boicoteen los productos que provienen de Rusia. De hecho, el fin de semana pasado, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbot, pidió a la Asociación de Restaurantes de Texas y a las tiendas del estado que retiren voluntariamente de sus estantes todos los productos hechos en ese país.
¿Boicot a los relojes rusos?
En una línea similar, en varios grupos de Facebook ha surgido un debate ya que algunas personas han planteado que dejarán de comprar los famosos relojes rusos Vostok –especialmente apreciados por los coleccionistas– o que los que ya tienen los botarán a la basura. Aunque otros consideran se trata de una medida absurda.
Otra medida que generó críticas esta semana fue la decisión de la Universidad de Milán-Bicocca, en Italia, que decidió cancelar un curso que se dictaría en esa casa de estudios sobre el escritor ruso Fedor Dostoievski, debido a la posible “polémica” que podía causar en medio de la invasión.
La situación fue denunciada por el académico que impartiría el curso, Paolo Nori, quien criticó que “el miedo que están dando los rusos está tomando dimensiones singulares”. “¿Ser ruso es un problema? ¿Incluso siendo un ruso muerto? Lo que está pasando en Ucrania es horrible. Pero estas cosas aquí son ridículas: una universidad italiana que prohíbe un curso sobre Dostoievski, no lo puedo creer. Deberíamos hablar más sobre Dostoievski o de Tolstoy, el primer inspirador de los movimientos no violentos”, dijo en Instagram. Tras la ola de críticas en redes sociales, la universidad decidió echar pie atrás.
En tanto, en Croacia, la Orquesta Filarmónica en Zagreb cambió totalmente el programa de uno de sus conciertos porque incluía tres piezas de Piotr Ilich Tchaikovsky, compositor ruso del siglo XIX, autor de obras como “El lago de los cisnes” o “El cascanueces”.
Fuente: Emol/EFE/Agencias.
